La fiscalía ha solicitado penas que suman tres años de prisión para un empresario acusado de un delito de homicidio por imprudencia grave y otro contra los derechos de los trabajadores, después de que un obrero falleciera tras precipitarse al vacío cuando trabajaba en el cerramiento de una nave en Puente Genil.
El día 19 de abril de 2005 un grupo de trabajadores comenzó el cerramiento superior de una nave industrial. El acusado llegó al poco tiempo y se marchó sin que en la obra se colocara medida de seguridad colectiva alguna.
Sobre las 13.00 horas, los trabajadores colocaron una plancha rígida y luego una traslúcida, momento en el que la víctima llevaba puesto el arnés, pero no estaba sujeto a un punto seguro. El obrero pisó la plancha traslúcida, que aún no estaba asegurada, se rompió y cayó al suelo, muriendo en al acto.
FUENTE: www.diariocordoba.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario